Sevilla tuvo que ser,
con su lunita plateada,
testigo de nuestro amor,
bajo una noche callada.
Y nos quisimos tú y yo,
con un amor sin pecado,
pero el destino ha querido,
que vivamos separados.
Están clavadas dos cruces,
en el monte del olvido,
por dos amores que han muerto,
sin haberse comprendido.
Están clavadas dos cruces,
en el monto del olvido,
por dos amores que han muerto,
que son el tuyo y el mío.
Hay barrio de santa Cruz,
hay plaza de doña Elvira,
hoy vuelvo yo a recordar
y me parece mentira.
Ya todo aquello paso,
todo quedó en el olvido,
nuestras promesas de amores,
en el aire se han perdido.
Están clavadas dos cruces,
en el monte del olvido,
por dos amores que han muerto,
sin haberse comprendido.
Están clavadas dos cruces,
en el monte del olvido,
por dos amores que han muerto,
que son el tuyo y el mío.
Que son el tuyo y el mío.
Tenha acesso a benefícios exclusivos no App e no Site
Chega de anúncios
Badges exclusivas
Mais recursos no app do Afinador
Atendimento Prioritário
Aumente seu limite de lista
Ajude a produzir mais conteúdo